A pocos minutos pero a un universo de distancia del ajetreo y el bullicio de la fascinante ciudad de Dublin me encontré con un espacio que pertenece a nuestros sueños, a un mundo de fantasía donde el lujo se entremezcla con el divertido deporte del golf: Luttrellstown Castle Resort.
Ubicado en 567 acres de exuberantes parques privados, este mágico campo de golf de campeonato es la escapada perfecta para unas horas de escapismo panorámico bajo el cielo azul de Irlanda. Imponentes y antiguos árboles dotan el camino entre arroyos y puentes de piedra que nos conducen por un campo infinitamente bello. Las vistas al castillo Luttrellstown deleitan mi mirada mientras juego, acentuando el sentimiento que tengo que me encuentro en un cuento de hadas.
Diseñado magistralmente hasta el último detalle por los célebres arquitectos de campos Donald Steel y Tom MacKenzie, el campo de golf de campeonato de 18 hoyos en Luttrellstown Castle Resort tiene 7,347 yardas con contornos naturales de parques antiguos y obstáculos de agua. Lo único que rivaliza con la calidad del golf que se ofrece es el entorno espectacular: desde el famoso río Liffey que pasa por el desgastado Templo Dórico y el cobertizo para botes, hasta la majestuosidad del imponente castillo irlandés del siglo XV escondido entre los árboles, es casi un desafío concentrarme en mi juego cuando estoy rodeada de un paisaje tan increíble.
Al final de los dieciocho hoyos, una casa club de última generación estilo cabaña alpina fue el escenario de una experiencia culinaria deliciosa. The Spike Bar, con magnificas vistas al campo de golf, seduce con su ambiente casual y excelente cocina con platillos regionales. Aquí disfruté del típico seafood chowder, elaborado con pan Guinness, y el clásico café irlandés con whisky.
La joya de la corona de este tranquilo y pintoresco santuario es el magnífico castillo Luttrellstown del siglo XV, mundialmente famoso, que se ofrece en alquiler de forma exclusiva. Un escenario elegante, discreto y lujoso para cualquier ocasión, desde bodas inolvidables, reuniones familiares íntimas y elegantes fiestas en el jardín hasta importantes reuniones de negocios y conferencias únicas, es aquí donde sucede la magia.
Después de más de 600 años, esta joya arquitectónica, con su sabor auténticamente irlandés, sigue siendo fiel a lo que era cuando se construyó por primera vez: un lugar opulento para la hospitalidad y el entretenimiento, adaptado a los requisitos exactos de cada visitante. A lo largo de los años, muchas celebridades notables y miembros de la familia real han pasado algún tiempo en el castillo de Luttrellstown. El Gran Duque de Luxemburgo, el Príncipe Rainiero y la Princesa Grace de Mónaco, Fred Astaire, Douglas Fairbanks, la Reina Magrethe II de Dinamarca, Paul Newman y Ronald Reagan se han alojado en este impresionante castillo irlandés. Más recientemente, los medios de comunicación de todo el mundo acudieron al Luttrellstown Castle Resort en 1999 para la boda de cuento de hadas de David y Victoria Beckham.
Luttrellstown toma su nombre de la familia Luttrell, que ocupó la propiedad durante más de 300 años hasta 1811. Se desconoce la edad exacta del castillo, ya que es casi imposible separar la estructura actual de la fortaleza anterior en torno a la cual se construyó el famoso edificio gótico. Sin embargo, hay pruebas que demuestran que Sir Henry Luttrell se apoderó de la finca en 1436, durante el reinado del rey Enrique VI. Desde entonces, este ha sido un ícono de la zona, famoso por su lujo desmesurado y la deslumbrante belleza de su campo de golf.
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