
En un rincón dorado del Caribe, donde el cielo y el mar se funden en un abrazo eterno, encontré mi propio edén: la Riviera Maya. Un susurro de mar y sol que atrae al viajero con promesas de arena blanca y aguas que cantan en cristalinas melodías. Este paraíso es una sinfonía de belleza natural y legado ancestral, donde las ruinas mayas de Tulum y Cobá narran historias olvidadas mientras el confort de lo moderno seduce nuestros sentidos en St. Regis Kanai.

Una joya recién nacida, el St. Regis Kanai redefine el arte de la hospitalidad, fundiendo la elegancia y la sofisticación con la rica herencia cultural que define a la Riviera Maya. Situado en un lugar donde el Caribe despliega su esplendor en vistas infinitas, el St. Regis Kanai es un santuario de tranquilidad y lujo. Su arquitectura moderna se entrelaza con la naturaleza, creando una armonía sublime que respeta y realza el paisaje circundante.
El St. Regis Kanai es un sueño elevado sobre un bosque de manglares, sus estructuras conectadas por pasarelas que se deslizan sobre la vegetación. La construcción es sutil, casi etérea, permitiendo que el resort se funda con el entorno. En el lobby, una cascada de agua se despliega como un lienzo en movimiento, reflejando las vistas de los manglares y el acceso directo a dos millas de playa de arena blanca. La inmersión en la naturaleza es total, desde los jardines hasta el césped exterior que invita a los huéspedes a conectarse con el paraíso que nos rodea.

Cada rincón del St. Regis Kanai respira sofisticación y cultura. La piedra caliza y el nogal, entrelazados con textiles inspirados en las ceremonias mayas, crean un ambiente de lujo auténtico. Los interiores, diseñados con una elegancia contemporánea, se enriquecen con muebles a medida y obras de arte de artesanos locales. Los textiles narran la historia del Calendario Maya, una oda a la herencia ancestral de la región.
En el hermoso St. Regis Bar, podemos vivir experiencias únicas, como el clásico St. Regis Sablage – el descorche de una botella de champagne con espada, y tastings únicas, como la vivencia sensorial de tequila y chocolate que tuve el placer de disfrutar. Con vistas al cielo nocturno, este espacio también nos ofrece el Kanai Mary, un cóctel que incorpora ingredientes ancestrales de la dieta maya.
Los Astor, fundadores de la marca St. Regis, buscaban los escenarios más exquisitos para su colección de casas, acogiendo a luminares y visionarios en los paisajes más impresionantes del mundo. El St. Regis Kanai Resort, en la Riviera Maya, rinde homenaje a ese legado, ofreciendo un refugio de glamour y una escapada a lo extraordinario. Aquí, en este rincón del paraíso, encontré una experiencia que trasciende el lujo y se convierte en un recuerdo imborrable, un poema sin fin tejido entre la arena, el mar y el cielo.
