La cultura, historia e indomable alma de Mexico encuentra su más auténtica expresión a través de arte culinario de los chefs que tienen pasión por expresar el espíritu de nuestro país mediante su cocina. Uno de los líderes e iconos más fascinantes del mundo de la gastronomía mexicana es el talentoso chef Gerardo Vázquez Lugo.
Arquitecto de profesión y chef por vocación, Gerardo nos dice: “La comida habla de nuestra cultura, herencia, raíces e influencias.” Declarada por la UNESCO patrimonio cultural intangible de la humanidad en 2010, la cocina mexicana toma el estrellato en el escenario de su restaurante Nicos.
Un restaurante de barrio, comida mexicana tradicional, sin pretensiones más con la gran intención de preservar la comida familiar mexicana, Nicos lleva más de cinco décadas ininterrumpidas de ofrecer tradición, calidad y buenos momentos. Apoyando a pequeños productores de México, aquí utilizan ingredientes locales y frescos, trayendo lo mejor de nuestra tierra a la mesa.
En Nicos tuve el placer de disfrutar de Chiles en Nogada, un majar perfectamente logrado repleto de historia La inesperada parada de Agustín de Iturbide en Puebla, de camino a la capital para firmar el Tratado de Independencia, vio nacer un platillo como ningún otro. Celebrando una fiesta en su honor de ultimo momento, los habitantes lograron crear una cena con los ingredientes de temporada que encontraron: chile, carne, frutas secas y pasas, granada y perejil. Así comienza la tradición del mes patrio de servir los famoso y exquisitos chiles en nogada.
También me deleité en platillos exquisitos como el sopa de tuétano con salsa verde cruda, el caldo de camarón cantinero con papas y zanahoria, y las clásicas encacahuatadas rellenas de hongos. Entre sus platos estrellas nos encontramos con joyas como el pollo en mole almendrado de la casa y el típico chamorro con cilantro y chile verde.
El chef Gerardo Vázquez Lugo es heredero de la tradición de servicio y cocina de sus padres, Raymundo Vázquez y Elena Lugo Zermeño, fundadores hace 60 años del restaurante Nicos en la zona de Clavería. Siempre un embajador de la cocina mexicana, fue sous chef en la cena de gala ofrecida en el hotel Le Bristol de París, para apoyar la candidatura de la Cocina Tradicional Mexicana a integrarse en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO. Años después fue invitado a la ceremonia donde se otorgó este nombramiento a nuestra cocina, la cual tuvo lugar en la ciudad de Nairobi, Kenia, el 16 de noviembre de 2010.
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