
Suzhou es conocida como la Venecia del Este; sus canales serpentean entre puentes centenarios y jardines imperiales que han inspirado a poetas y eruditos durante milenios. Sus templos, patios y callejones guardan el eco de la antigua China, mientras sus museos, teatros y boutiques de seda revelan una ciudad viva, refinada. Entre sus mas recientes joyas se encuentra el espectacular The Ritz-Carlton, Suzhou.
Un hotel cuya elegancia es digna de la realeza, The Ritz-Carlton se alza como si alguien hubiera tejido en silencio un espacio donde el tiempo se detiene y la belleza se vuelve tangible. Este refinado hotel se posa como un suspiro sobre el paisaje ancestral de China, donde los jardines flotan y los canales murmuran historias milenarias.

Suzhou es una ciudad que parece haber sido pintada con tinta y paciencia sobre papel de arroz. Desde el primer paso del Ritz-Carlton, el aire se vuelve distinto: más delicado, más denso de historia y sutileza. La entrada es una oda al equilibrio. Mármol y madera conversan en un idioma elegante, mientras la luz natural se filtra como si también supiera que aquí todo tiene intención.
En cada rincón de la ciudad se percibe una armonía sutil entre naturaleza y arquitectura, entre tradición y modernidad. Al entrar a Ritz-Carlton, Suzhou se atraviesa un umbral invisible hacia un universo donde el arte del servicio y la poesía del espacio caminan de la mano. El diseño se inspira en la seda que ha sido tejida durante siglos en esta ciudad, y cada línea, cada textura, es una caricia al alma.
Diseñado por el aclamado estudio KPF Architects, la llamativa fachada del hotel utiliza técnicas modernas para reinterpretar elementos tradicionales de Suzhou, como los tejados de tejas azules superpuestas, los biombos plegables y el concepto de espacios negativos en las pinturas chinas. Los interiores, conceptualizados por el renombrado arquitecto Peter Remedios, rinden homenaje al histórico comercio de la seda de Suzhou y a los emblemáticos jardines clásicos.

Fue en este escenario de tonos neutros y un fondo sereno que tuve la oportunidad de saborear la cultura de China en su mas refinada expresión. Levantando mi copa de excelente vino chino, en un brindis con el carismático gerente general Alfonso Orona, orgullosamente mexicano, me embarqué en una travesía sensorial que abraza tanto lo tradicional como lo contemporáneo: Biao Xia. En este restaurante de cocina de Jianssu y Zhejiang, el ritual de la comida se transforma en celebración. La cocina china del chef Tommy Tian se ofrece con respeto y reverencia – desde los atrevidos crocantes de mango con queso, y el tradicional cangrejo de temporada, hasta la joya de la corona del menú: el tradicional pato Pekin, logrado a la perfección. Todos los platillos son elaborados con esmero con ingredientes frescos y locales, capturando el espíritu del destino en cada bocado.
Un edén culinario y un espacio cuya belleza evoca la cara más elegante de Suzhou, cada momento en The Ritz-Carlton es el resultado es una sofisticación discreta que refleja armoniosamente el rico patrimonio de la ciudad.
