Del 18 al 21 de junio, Cozumel se iluminó con el vibrante espíritu del Cozumel Vivo Fest, un evento que no solo celebró la cultura local, sino que también inspiró a los participantes a conectar profundamente con la naturaleza y el bienestar personal.
Situado en la impresionante Reserva de la Biosfera del Caribe mexicano, este festival se destacó como una plataforma para explorar la riqueza biocultural de la isla. Desde la apertura con ceremonias tradicionales hasta las actividades diurnas de acroyoga y meditación al amanecer, cada momento fue diseñado para nutrir el cuerpo y la mente en el entorno natural único que ofrece Cozumel.
Uno de los puntos culminantes del festival fue mi conferencia sobre el “Arte y la Ciencia de la Felicidad”; esta charla no solo iluminó sobre las prácticas para mejorar la calidad de vida, sino que también subrayó la importancia de la conexión emocional de nuestra mente y cuerpo. Basada en la psicología positiva, la ciencia de la felicidad es una práctica que busca iluminar los caminos hacia una vida equilibrada y feliz. El hilo guiado durante la plática fue el vino – un instrumento de placer, el cual puede ser apreciado plenamente al practicar el mindfulness.
El Cozumel Vivo Fest no solo se centró en actividades físicas y espirituales, sino que también promovió un compromiso con la sostenibilidad ambiental. Desde la enseñanza de prácticas de pesca responsable hasta la concienciación sobre la conservación de los arrecifes de coral, el festival inspiró a los participantes a adoptar un enfoque más consciente hacia la protección del medio ambiente. Además, hubieron oportunidades para explorar la artesanía local, como la navegación en canoas mayas y talleres creativos para niños, que conectaron a los participantes con las tradiciones ancestrales de la isla.
El Cozumel Vivo Fest fue celebración de cuatro días y un llamado a la acción para todos los asistentes y residentes locales para preservar y valorar el patrimonio cultural y natural de Cozumel. A través de la educación y la experiencia compartida, el festival dejó una impresión duradera en la comunidad, reforzando el compromiso de todos hacia un futuro más saludable y sostenible.
El Cozumel Vivo Fest fue una experiencia transformadora que unió la sabiduría del pasado con las aspiraciones de un futuro más brillante, todo en el idílico entorno de la majestuosa isla de Cozumel.
Blog de Deby Beard 